Datos de la ruta:
- Desnivel: 700 m (aprox.)
- Distancia: 43 km
- Actividad: bicicleta de montaña
- Dificultad: ruta sencilla, ideal para una tarde de bicicleta para esta primavera espectacular.
Descripción
Nuestra referencia la situamos hoy en el pueblo de Matarrubia, donde nos acercamos a disfrutar de la primavera y un recorrido que promete intensos colores.Iniciamos la ruta siguiendo las aguas del arroyo de Matarrubia. Una pista, el camino de la Ermita de la Virgen de los Olmos, juguetea con el cauce. En los primeros kilómetros la pista es ancha y lo suficientemente alejada del cauce para que no suponga ningún problema el avance.
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| Salida de Matarrubia |
A medida que avanzamos la pista se estrecha y se acerca al cauce. En algún punto tenemos que vadearlo aunque sin mucho problema.
Las intensas lluvias de las últimas semanas han traído consigo una primavera de colores intensos. El cielo aparece decorado con nubes que por el momento, nos acompañan inocentes.
Tras varios kilómetros, cerca del cruce con la carretera, somos testigos de un hecho curioso. El pequeño arroyo de Matarrubia ha modificado el cauce en un pequeño tramo. El agua circula por donde antes solo había arena. Quizá una consecuencia de las intensas tormentas. Lo cierto es que, en el actual cauce, se ha abierto una profunda grieta que aparece inundada. Tiramos una piedra y vemos como remolonea sin que veamos el final. Fenómeno geológico, por lo menos, curioso.
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| Cauce del arroyo de Matarrubia |
Cerca de la ermita de la Virgen de los Olmos, nos juntamos con la carretera durante unos cientos de metros. Los justos para enlazar con una pista que avanza paralela al curso del río Jarama. Estamos en el camino de las viñas, pero son las retamas y el intenso olor de sus flores los que colman el ambiente.
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| Camino de las viñas |
Numerosos son los arroyos que se abren paso entre estas tierras rojizas. En nuestro recorrido cruzamos el arroyo de Conrayado, el arroyo de Muradiel y el arroyo Valdelacasa, antes de desviarnos de las aguas del río Jarama.
La pista, guiada por el arroyo del Lugar, nos lleva hasta la localidad de Puebla de Vallés. Encerrada entre cerros, pasa poder proseguir con nuestro recorrido no nos quedará más remedio que ascender. Para ellos seguiremos la carretera durante kilómetro y medio. La pendiente es fuerte. El asfalto se ve escoltado por las incipientes flores de las jaras de olor intenso y pegajoso.
Nos desviamos del alquitrán y el asfalto, para seguir por pistas más amables. Inicialmente en ligero ascenso siguiendo la parte alta de la loma del Canalizo, rondando los 1000 metros de altitud. Este tramo nos depara una hermosas vistas del pico Ocejón, lejano, altivo. Y ahora es el morado del romero el que decora la estampa.
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| Vistas del Pico Ocejón |
Atravesamos de nuevo el asfalto, para seguir por las pistas que continúan al otro lado. Proseguimos por las cotas altas. poco antes de alcanzar el collado de Valdepeñuelas (1027 m) nos desviamos por un estrecho sendero.
Iniciamos el descenso hasta el cauce intermitente del arroyo de la Fuente.
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| Descenso al arroyo de la Fuente |
Una vez alcanzada la parte más baja del pequeño valle, el avance se vuelve plácido, fácil. Rodeados de un ambiente lleno de cantos, enlazamos con la carretera que nos lleva hasta la Mierla. En el pueblo nos confirman que han cerrado el bar, un golpe más para un pueblo en vías de convertirse en un silencio abismal.
Dejamos la Mierla atrás siguiendo la carretera. No nos cruzamos con ningún vehículo en los escasos tres kilómetros que nos lleva volver a enlazar con pistas.
Las pistas que continúan al otro lado de la CM-1004 no son tan buenas, ni tan amables. Las pendientes son fuertes y el firme más pedregoso. Tras atravesar el arroyo del Valle, echo el pie a tierra para subir parte de la fuerte pendiente que bordea el cerro de La Muela (993 m).
Al otro lado nos espera el cordel de las Merinas. Muchos más llano, nos acercamos a las lagunas de la Puebla de Beleña. Es la primera vez que las veo con agua y es un gran espectáculo. En las fotografía no es posible apreciar la vida que se mueve en estas pequeñas lagunas, todo lleno de cánticos, del croar de las ranas, de flores. Es la expresión de la vida en estado puro.
Primero nos acercamos a la laguna Chica, para después, siguiendo el cordel, acercarnos a la laguna Grande. Gozamos durante unos minutos de nuestro silencio y del ruido ensordecedor que nos rodea. Nuestro mutismo e inmovilidad se ve premiada con la pérdida de la timidez de las aves que se acercan sin miedo y nos sobrevuelan.
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| Laguna Chica. Puebla de Beleña |
Nos desviamos del cordel de las Merinas para tomar una pista apenas visible entre tantas flores, que desciende hacia el pequeño valle abierto por el arroyo de Valdehuecas. El cielo azul, el tapiz de flores de todos los colores, el olor de las jaras y las montañas en el horizonte. ¿Qué más se puede pedir?
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| Pista de descenso a Matarrubia |
Apenas un kilómetro nos separa de nuestro punto de partida. Disfrutamos de estos últimos cientos de metros e inspiramos con fuerza el olor de la primavera.
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RECORRIDO:
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INFORMACIÓN PRÁCTICA:
- Podéis encontrar el track de este recorrido en: https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/matarrubia-la-mierla-circular-25039219
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