sábado, 25 de septiembre de 2021

Ascensión al Castillo de Acher (Pirineo aragonés)

 

Datos de la ruta:

  • Desnivel: 1250 m
  • Distancia: 13,5 km
  • Actividad: ascensión
  • Dificultad: ruta con punto de inicio en la Selva de Oza. La ruta es sencilla (en verano), la única dificultad reseñable (y, aún así, es muy fácil) es la pequeña trepada en la canal de acceso.

Recorrido

Nos situamos en la Selva de Oza (en el valle de Echo) para subir una de las cumbres más emblemáticas de esta zona de los Pirineos occidentales: el Castillo de Acher (2384 m). Esta cumbre presenta un fisonomía peculiar de paredes escarpadas que le confieren un aspecto de fortaleza (de ahí su nombre). Y es que el Castillo de Acher es un magnífico ejemplo de sinclinal colgado, de esos que se estudian en geología porque es único con su magnífico valle colgado.  

El inicio de la ruta está perfectamente señalizado. En los primeros pasos coincidimos con las indicaciones del GR-11.1 hasta que nos desviamos de la pista principal para tomar un sendero que inicia un fuerte ascenso. El sendero gana altura entre un denso pinar. 

Castillo de Acher
Sendero de ascenso al Castillo de Acher

 

Sin dejar de ascender atravesamos el barranco Espata para cambiar de ladera y proseguir la ascensión que va ganando pendiente. 

A partir de los 1600 metros el bosque va pediendo espesura hasta dejar definitivamente atrás el cobijo de las sombras. El sol aprieta y tenemos ante nosotros las primeras panorámicas de las inmensas murallas del Castillo de Acher

Castillo de Acher
Castillo de Acher

Ahora el sendero se estrecha y crea un camino claro a través de las praderas de altura que cubren las laderas de la sierra de Secús. Al dejar atrás los bosques ante nosotros se imponen el universo de la roca. Enfrente podemos ver los esbeltos perfiles que forman las cumbres de la sierra de Alano

Sierra de Alano
Sierra de Alano

Las ascensión es lenta, pero sin dificultad. Alcanzamos los 1700 m de altitud en las proximidades del refugio del Castillo de Acher. A partir de los 1800 metros el sendero se empina algo más, pero será a partir de los 1900 donde el sendero empieza a ascender de manera más decidida. Sobre nuestras cabezas los murallones del Castillo de Acher nos anuncian una dura subida. 

Al otro lado del inmenso valle que se abre a nuestros pies, sobre las tierras rojizas, se izan las paredes que escoltan el barranco Borregueril de Acher. Al fondo creemos intuir la esbelta silueta de un viejo amigo: el Bisaurín (2654 m).

Barranco Borregueril de Acher
Barranco Borregueril de Acher

A partir de los 2000 metros de altitud aproximadamente no encaramos con las paredes del Castillo de Acher. Una estrecha senda asciende con fuerte pendiente por la ladera sur de nuestro objetivo. El sendero atraviesa ahora una zona de formaciones rojizas que deben su color a la oxidación de los minerales de hierro.

Tras una agotadora y lenta subida, llegamos al paso clave, una pequeña canal que se abre paso entre la roac para darnos acceso al valle colgado del Castillo de Acher.

Canal de acceso al Castillo de Acher
Canal de acceso al Castillo de Acher

 

Las vistas, una vez superada la canal, harán que cualquier esfuerzo haya merecido la pena. Ante nosotros un regalo de la geología, el valle colgado de este hermoso sinclinal con sus bordes levantados y una amplia depresión central.

Valle colgado. Castillo de Acher
Valle colgado. Castillo de Acher
 

La cima más elevada de esta formación se sitúa justo enfrente, aún teendremos que salvar un cómodo desnivel de unos 100 metros antes de pisar la ansiada cumbre. 

Desde la cumbre del Castillo de Acher (2384 m) se tienen una magníficas vistas. En la lejanía se divisa el perfil tan característico del Midi d'Ossau, el Anayet y los primeros tresmiles del Pirineo aragonés. Más cercano, las impresionantes laderas del Bisaurín (2669 m).

Cumbre del Castillo de Acher (2384 m)
Cumbre del Castillo de Acher (2384 m)

Desde la cumbre también merece la pena echar un vistazo el macizo del Peña Forca

Macizo del Peña Forca
Macizo del Peña Forca

Tras disfrutar un buen rato de la cumbre, iniciamos el descenso deshaciendo nuestros pasos. El camino de regreso, a pesar de ser el mismo que llevamos en la subida, nos ofrece nuevas perspectivas del camino y de las montañas que nos rodean. 

Una última mirada hacia las alturas, antes de adentrarnos en el bosque, nos ofrece una última panorámica de las paredes que hemos superado y que nos han ofrecido un buen día de montaña.

Castillo de Acher
Castillo de Acher

Nos adentramos en las refrescantes sombras de la selva de Oza para llegar hasta el punto de salida.

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RECORRIDO:

Existen numerosos tracks en wikiloc.

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INFORMACIÓN PRÁCTICA:

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